ALICANTE. El Consell examina las posibilidades de compra del antiguo cine Ideal de Alicante con el fin de rehabilitarlo para uso público. La propuesta quedará literalmente sujeta a revisión este viernes en la reunión de la Junta de Valoración de Bienes del Patrimonio Cultural Valenciano con el fin de emitir un pronunciamiento sobre el ejercicio del derecho de retracto que resultaría necesario para adquirir el inmueble, al mismo precio abonado por el Grupo Baraka al asumir su propiedad, en torno a cinco millones, en enero de este año.
La Junta de Valoración es, de hecho, el órgano asesor de la Conselleria de Cultura que se encarga de manera específica de valorar económicamente los bienes culturales que la Generalitat se proponga adquirir con destino a museos, bibliotecas, archivos u otros centros de depósito cultural de titularidad pública, así como de informar sobre el ejercicio de los derechos de tanteo y retracto por parte de la Generalitat, según se detalla entre sus fines esenciales en su reglamento de funcionamiento.
Según pudo constatar Alicante Plaza, la propuesta de adquisición del céntrico edificio está incluida en el orden del día de la reunión con lo que sus componentes deberán pronunciarse sobre su oportunidad, viabilidad y conveniencia. Para ello, los ocho vocales que conforman la Junta (seis por designación de la Conselleria de Cultura, entre los que figuran expertos universitarios y de colectivos profesionales, y dos nombrados a propuesta de la Conselleria de Hacienda) y su presidenta, la directora general de Cultura, Carmen Amoraga, deberán sopesar el trabajo promovido hasta ahora por los técnicos de los departamentos autonómicos de Cultura, Hacienda y Participación para encajar las opciones de compra del edificio y salvar la diferencia del desembolso a realizar, toda vez que -como informó Alicante Plaza- existe una primera tasación elaborada por la propia Generalitat que asigna al edificio una valoración de entre 1,5 y 1,8 millones. Es decir, lejos de los cinco millones pagados por Baraka.
De hecho, ese trabajo técnico podría completarse, precisamente, con la emisión de otro informe económico elaborado por la propia Junta de Valoración, ya que esa es otra de sus funciones principales, según se concreta en el artículo 3.5 de su reglamento: "Realizar cuantas valoraciones de bienes de carácter cultural le sean solicitadas por la conselleria competente en materia de cultura y, a través de esta y en la forma que reglamentariamente se determine, por las demás administraciones públicas valencianas, para el mejor cumplimiento de los fines de Ley 4/1998".
Hasta ahora, el departamento autonómico que coordina Raquel Tamarit viene defendiendo desde el pasado mes de enero su pretensión de trabajar por intentar la compra del inmueble con el fin de rehabilitarlo y darle un uso cultural público todavía por determinar (previsiblemente como sede de la Filmoteca Valenciana en Alicante), en cumplimiento de la propuesta aprobada en el mecanismo de los presupuestos participativos de la Generalitat desarrollado por primera vez en este ejercicio. Así, en las cuentas autonómicas se consignó la partida necesaria para abordar la compra.