El estudio "Hogares con Psicología" revela preocupantes cifras sobre el impacto del ruido en los españoles. Según este informe, un tercio de la población en España se siente molesto por el ruido en sus hogares. Este problema parece estar exacerbado por la convivencia con vecinos ruidosos, ya que el 75% de los encuestados escuchan más ruido del deseado procedente de sus vecinos. Además, casi la mitad de los encuestados identifican el tráfico como el principal problema de ruido en sus entornos residenciales.
La falta de insonorización en las viviendas se ha relacionado directamente con problemas de salud mental, como síntomas de ansiedad y depresión, así como con dificultades para conciliar el sueño. Por el contrario, vivir en un entorno silencioso se ha asociado con un mayor bienestar psicológico en general. Estos hallazgos ponen de relieve la importancia del entorno acústico en nuestras vidas y sugieren la necesidad de abordar el problema del ruido de manera más efectiva.
Otro estudio citado en el informe señala que el tráfico es responsable de más del 80% de la contaminación acústica en las ciudades españolas. A pesar de esto, la regulación del ruido en las ciudades no es clara ni efectiva, lo que deja a muchos ciudadanos expuestos a niveles nocivos de ruido en su vida diaria. Esta falta de regulación contrasta con el hecho de que los perjuicios del ruido se equiparan a menudo con los de la contaminación del aire, lo que subraya la necesidad de abordar este problema de manera más seria y sistemática.
El ruido durante la noche parece ser especialmente perjudicial, ya que puede interferir significativamente con el sueño y provocar irritabilidad y problemas de concentración durante el día. La falta de sueño de calidad puede tener consecuencias graves para la salud física y mental a largo plazo, lo que subraya la importancia de abordar el problema del ruido de manera efectiva.
Es interesante notar que la percepción del ruido es subjetiva y puede variar de una persona a otra. Sin embargo, el impacto objetivo del ruido en nuestra salud y bienestar es innegable. Por lo tanto, es importante tomar medidas para reducir el ruido en nuestros entornos y proteger nuestra salud mental y física.
Tal y como relata la coautora del informe, Noelia Morán, en las casas con escasa insonorización se encontró relación con sintomatología ansiosa, depresiva y los problemas de sueño, mientras que tener una vivienda silenciosa se relacionaba con el bienestar psicológico en general.
Pero ¿estamos tan expuestos como parece? ¿Somos todos igual de sensibles ante el ruido?¿Estamos ante una amenaza infravalorada? A estas cuestiones responde el especialista en Acústica Aplicada, Jose Luis González Cespón, una rama de la ingeniería que mide el impacto del ambiente sonoro en las personas.