España, primer productor mundial de aceite de oliva, se enfrenta a otra mala cosecha el próximo año. La sequía y el cambio climático están afectando de lleno a nuestros olivos que, incluso, han iniciado una segunda floración este julio tras la ocurrida en abril. Prueba evidente de que el clima les está afectando negativamente.
Esta caída de la producción ha impulsado el precio del aceite a niveles de récord histórico y ha tenido un efecto negativo tanto en su consumo como en las exportaciones.
¿Cómo afectan los cambios en el clima a la vida de las plantas? ¿Podrá resistir el sector un segundo año de una producción pobre? ¿Hay suficiente stock para cubrir la demanda?, ¿Y el empleo, se verá muy afectado dentro del sector? ¿Podrá la innovación y la inversión reconducir la situación en el futuro?
Hablamos con Luis Rallo, profesor emérito de pomología de la Universidad de Córdoba, Máster de Olivicultura y Elaiotécnia, Rafael Pico, Director General de ASOLIVA, Asociación Española de la Industria y el Comercio Exportador del Aceite de Oliva y con Cristóbal Cano, secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Andalucía.