El Ministerio de Trabajo y los sindicatos han alcanzado un acuerdo para aprobar el Estatuto del Becario. Se firma el acuerdo sin consenso con los empresarios y con la comunidad educativa en contra.
La nueva normativa regulará el periodo de prácticas que realizan los estudiantes durante su formación y contempla multas de hasta 225.000 euros para las empresas que lo incumplan.
El Estatuto del Becario tiene como objetivo evitar que los estudiantes ocupen puestos laborales. Además, la medida llega al mismo tiempo que la nueva FP, en la que las prácticas cobran mayor relevancia y junto a la obligación de las empresas de dar de alta en la Seguridad Social a los becarios.
Mientras los sindicatos celebran el pacto, los empresarios le han negado su apoyo y los rectores universitarios han mostrado su preocupación por la dificultad que pueden encontrar los estudiantes para realizar sus prácticas obligatorias.
Abordamos las novedades, las luces y las sombras de la nueva norma con el delegado de la revista Magisterio en la Comunitat Valenciana, Pablo Rovira; el portavoz confederal de RUGE, organización juvenil del sindicato UGT, Eduardo Magaldi; el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) y vicepresidente de la CEOE, Salvador Navarro; y el delegado de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), José Luján.