Sin duda
Alesteir Crowley (1875-1947) se ganó a pulso el sobrenombre de 'el hombre más pervertido del mundo. Drogadicto, gorrón, mago, bon vivant, inventor de religión y destructor de sociedades ocultistas... Son tantas las máscaras que llevó este gran provocador que es imposible quedarse con una sola. De su vida, hay etapas particularmente interesantes, como es su estancia en la isla de Corfú (Italia), donde fundó la Abadía de Thelema.
Testigo de excepción de esos años fue
Leah Hirsig (1883-1975) una mujer que nació libre y contestataria, pero que tuvo la mala fortuna de cruzarse con ese gran encantador de serpientes que fue Crowley. Tras darlo todo por él y ser repudiada, dejó varios escritos de los cuales La Felguera trae ahora una parte en
La Mujer Escarlata y La Bestia. Los diarios mágicos de Leah Hirsig. El texto ha sido traducido por el escritor
Javier Calvo (autor de libros como
El fantasma en el libro o
Corona de Flores y traductor de
Terry Pratchett, Alan Moore o
Lovecraft) y con él hemos hablado.