Este fin de semana se constituían los ayuntamientos en toda la Comunitat Valenciana y el resto del país, tras las elecciones del 28M. Cita tras la que el PP ya ostenta la vara de mano en nueve de los quince grandes municipios de la Comunitat Valenciana. Todo ello con el horizonte de las generales del 23J, asuntos de los que hablamos con Miguel Soler, que ha sido responsable de campaña del PSPV.
La fotografía de esa constitución de los ayuntamientos, con pactos y demás, dejaba claro el vuelco electoral con sensaciones malas en el PSPV después de la derrota autonómica y de consistorios claves. "Cuando los resultado son malos, son difíciles de digerir. Una gran parte de la población no ha votado en clave autonómica ni en clave local, nunca hay un solo factor pero éste ha sido relevante", sostiene Soler quien valora el pacto PP Vox, tras haber alcanzado un acuerdo de Gobierno. "Se trató la abstención en la Ejecutiva del PSPV, pero no podemos hablar de un mundo ideal, de un cordón sanitario, pero en la Comunitat sabemos las diferencias que hay entre PP y Vox, por ejemplo en Educación y te puedo asegurar que hay diferencias en el discurso público, en el ideológico, pero después fue el PP el que hizo recortes, el que dejó las infraestructuras en mal estado, pero la diferencia entre ellos es reducida".
Soler mantiene que el acuerdo estaba ya encarrilado y valora las decisiones del PP de dar el gobierno en Barcelona y en Vitoria a los socialistas, para que no gobernaran ni Junts junto a ERC en la capital catalana ni Bildu en la capital de Euskadi. "A lo mejor, en Cataluña, en Barcelona en particular, nos tienen mucho que agradecer a la Comunitat Valenciana, a lo mejor en el pacto en Barcelona se ha producido para intentar contrarrestar lo que estaba pasando aquí, eso lo sabrán los que lo han pactado", asevera el secretario autonómico de Educación en funciones.
Relación con Compromís
De entre las informaciones que se sucedieron la pasada semana, en medio de las negociaciones, se produjo la de la Mesa de Les Corts, en la que el PP cedió uno de sus puestos, la presidencia a Vox en virtud de su pacto, y ustedes se quedaron con las dos que marcaba el reglamento, con lo que Compromís se quedaba fuera, lo que generó un enfado importante de la coalición con ustedes que puede hacer pensar que el espíritu del Botànic se ha desvanecido. "Yo creo que no se ha desvanecido nada, en cada contexto se toman las decisiones que se consideran oportunas, también sabemos que el PSOE ha sacado 49.000 votos más que las últimas elecciones a pesar de haber tenido siete puntos menos de participación y que Compromís ha tenido 930.000 votos menos. Es lo que han dicho los ciudadanos, pero ese enfado no ha llevado a que en diferentes municipios donde haya que configurar gobiernos progresistas se haya hecho, por lo cual, no es un enfado general", valora Soler.
Y en clave orgánica, parece que reina la calma en el PSPV; calma tensa, después de la configuración de listas para el Congreso y el Senado, sobre las que Ferraz enmendó la lista de la autonómica de Puig que había enmendado a su vez las de las provinciales de Fernández Bielsa y Alejandro Soler que después de reunirse en Madrid con la dirección nacional alcanzaron un acuerdo en el que primó su posición sobre la de Puig, cuya posición quedaba debilitada y su futuro a la espera de lo que pueda pasar el 23J, algo que niega Soler. "Puedo asegurar y puedes preguntarle a cualquier miembro de la Ejecutiva si hubo una sola intervención que se estuviera en stand-by o que se pusiera un plazo determinado, no. Se produjo una intervención unánime que Ximo Puig había demostrado que por parte de los electores que compartían nuestra posición y que le pedimos, unánimemente que Puig continuara al frente del PSPV y no se le puso un tiempo determinado", comenta Soler que insiste en que los procesos fueron normales "aunque el ruido, la retransmisión no lo fue y pudimos dar mala imagen", y recuerda que en la Ejecutiva Nacional del PSPV se aprobaron las listas por 44 votos a 10, que luego el Comité Federal después configuró las suyas.