VALÈNCIA. ¿Cuántas veces hemos oído la expresión: ¡el problema está en tu cabeza!? Pues, en algunas ocasiones, puede ser cierta.
Bárbara López Martí, responsable de área de enfermería integrativa y mindfulness en el hospital IMED Valencia ha explicado en los micrófonos de Plaza Radio hasta qué punto es importante controlar las emociones y sentimientos para estar sanos, tanto física como mentalmente.
Hay muchos problemas o enfermedades que se podrían solucionar con el poder del mindfulness y, en el caso de que no tengan solución, seguro que mejorarían o se aprendería a llevarlos mejor.
Pero, ¿qué es mindfulness? Esta especialidad está basada en el desarrollo de la atención consciente o atención plena, una forma específica de prestar atención de manera intencionada al momento presente y sin juicios ni críticas.
La Unidad de Medicina Integrativa y Antiaging de IMED Valencia ha puesto en marcha una nueva área de mindfulness donde se realizan cursos en los que se aprende a dar respuestas a los problemas sin que afecte a tu salud. Se conecta con el "aquí y ahora" necesario para tomar decisiones adecuadas que puedan mejorar de manera muy significativa nuestra salud.
Mindfulness ayuda a resolver los problemas de estrés y ansiedad, dolor y enfermedades crónicas. También se aprende a llevar una alimentación y una vida saludable.
Desde el punto de vista del entorno hospitalario, como ocurre en IMED Valencia, el mindfulness es un complemento, un apoyo transversal a toda la unidad de medicina integrativa y antiaging y ofrece soporte al resto de programas y especialistas de la unidad.
“Yo digo que es una ayuda a los médicos de las diferentes especialidades. Los médicos realizan su trabajo y mindfulness consigue que nuestro cuerpo esté más calmado y responda mejor a diferentes tratamientos", como los oncológicos, de fertilidad o de dolor crónico.
Bárbara López pone el ejemplo de un paciente que está esperando un diagnóstico o que le tienen que operar. Esta situación genera estrés y, en muchas ocasiones, “llega a producir pensamientos recurrentes sobre lo que está pasando. `Y si me pasa esto, y si sale mal la operación…´”. Estos pensamientos son muy difíciles de controlar y pueden provocar situaciones de estrés que se alargan en el tiempo y empeorar la enfermedad que se padece o, incluso, provocar nuevas. "Estos pensamientos recurrentes no siempre responden a una situación real y hacemos un mundo de lo que no lo es." Sin embargo, es muy difícil saber despejar estos pensamientos si nadie te ha enseñado a ello. “El estrés parece algo abstracto, que no tenga mucha importancia cuando en realidad es algo físico que se transforma en una alteración hormonal al segregar cortisol y adrenalina que puede empeorar una situación”, destaca la especialista en mindfulness.
La segregación de estas hormonas tiene su origen en algo positivo: sirven para huir de un peligro real. “Es un subidón de la energía” que, en la prehistoria era muy práctico para, por ejemplo, escapar velozmente de un león que te persigue para atacarte. Pero, hoy en día, ese león ya no existe. El cortisol y la adrenalina sirven para salir corriendo o luchar, pero no son útiles cuando el peligro es por una enfermedad o un problema en el trabajo. “No se puede salir corriendo del trabajo”. El mindfulness te enseña a afrontar estas situaciones sin generar estrés”, incide la enfermera especialista en medicina integrativa. Si esos niveles de estrés perduran en el tiempo tiene consecuencias físicas como tensiones musculares, ritmo cardiaco alterado o insomnio, entre otras cosas. Además, en lugar de afrontar el problema, se agrava recurriendo a pastillas para dormir, café, tabaco o alcohol. Si padecemos una enfermedad, este estado físico lo puede empeorar.
Bárbara López hace especial hincapié en que debemos ser más cariñosos con nuestro cuerpo y enumera las catorce necesidades básicas que debemos tener cubiertas para estar sanos: Saber respirar, comer y beber, eliminar los productos tóxicos de nuestro organismo, moverse, mantener una postura adecuada, dormir y descansar, vestirse, mantener una temperatura adecuada, proteger los tejidos, evitar peligros, comunicarse, vivir según nuestras creencias y valores, entirse realizado, divertirse y aprender.
Como ejemplo, Bárbara López recuerda que, al divertirnos, segregamos endorfinas, que generan un efecto muy beneficioso para nuestro organismo, todo lo contrario, a las generadas por el estrés continuado.“En nuestro cuerpo todo está encadenado, es un engranaje en el que todo debe funcionar bien”.
IMED Valencia organiza el 13 de abril una sesión gratuita online de mindfulness. Será interactiva y enseñará las herramientas básicas sobre las que se construye esta especialidad fundamental para tener una mente sana en un cuerpo sano.