La Unión ha recuperado un símbolo de su pasado minero con la reinauguración -en su nueva ubicación de la Plaza del Liceo- del castillete 'La Marquesita', un emblema de la tradición minera unionense que ha sido restaurado gracias a una inversión de la Consejería de Cultura de 44.000 euros.
"La restauración ha tenido como objetivo garantizar la adecuada conservación de este castillete, que es una parte de la identidad y el pasado minero de La Unión y que debemos preservar para el conocimiento de las futuras generaciones", señaló la consejera Carmen Conesa, que participó en el acto de reinauguración junto al alcalde, Joaquín Zapata.
El estado de conservación del castillete era muy deficiente, con ataque de insectos xilófagos en las maderas de la estructura y oxidación de sus elementos metálicos. Este proceso consistió en el tratamiento de la madera con limpieza, vaciado de las partes más afectadas y reintegración para recomponer la sección dañada y devolver la resistencia original, sellado de grietas y protección final para nutrir la madera y aislarla de agentes atmosféricos. En cuanto a las piezas de metal, la intervención consistió en el lijado y limpieza de la superficie, inyecciones de resina en las fisuras, tratamiento y protección final.
El castillete provenía de la finca 'El Beal', donde estaba la explotación de la mina 'Marquesita', y fue trasladado a la plaza Asensio Sáez desde la mina en el 1986. Se trata de una estructura de madera de pino que forma parte del sistema de transporte vertical, cuya función es soportar las poleas a la suficiente altura sobre el brocal del pozo para permitir las maniobras de extracción. Estos sistemas cuentan con cuatro pies verticales que sostienen las poleas en su parte superior y dos tornapuntas, enlazadas entre sí, que dan estabilidad y resistencia.