En 2019, Facsa lanzó uno de sus proyectos más relevantes: la creación de programas de formación profesional pioneros en el sector del agua. Laura Gabín, jefa del departamento de Formación de Facsa, explica cómo esta iniciativa busca preparar a las futuras generaciones para enfrentar los retos tecnológicos y ambientales del sector.
Laura Gabín subraya la importancia de la profesionalización en el sector del agua. "El agua es un recurso vital, y su correcta gestión es fundamental para la sostenibilidad, el medio ambiente, la salud y la economía", afirma. La creciente complejidad del sector, impulsada por avances tecnológicos, digitalización y cambios legislativos, requiere profesionales capacitados para manejar sistemas avanzados de tratamiento y distribución.
Un modelo ganar-ganar
Facsa ofrece dos grados en formación profesional: el grado medio en Redes y Estaciones de Tratamiento de Agua y el grado superior en Gestión del Agua. "Este modelo formativo es un ganar-ganar, tanto para la empresa como para el alumnado", explica Gabín. Los estudiantes adquieren conocimientos técnicos y competencias transversales en un entorno real, lo que les permite integrarse rápidamente en el mundo laboral con una formación completa y práctica.
El día a día de los estudiantes de Facsa combina clases teóricas y prácticas. "Contamos con un aula multifuncional y un banco de pruebas a tamaño real que replica todas las instalaciones relacionadas con la gestión del agua", comenta Gabín. Además, los estudiantes participan en actividades extraescolares como visitas a depuradoras y plantas potabilizadoras, y prácticas en laboratorio, lo que enriquece su experiencia educativa.
La formación continua como clave para la adaptación
Gabín destaca la capacidad de adaptación como una habilidad esencial en el sector. "La formación continua es crucial para adaptarse a los cambios tecnológicos, legislativos y la digitalización, así como al impacto de la inteligencia artificial", señala. Facsa apuesta por una combinación de formación tradicional y metodologías innovadoras como píldoras formativas, vídeos cortos y gamificación para facilitar el acceso a la formación en cualquier momento y lugar.
Los profesionales del sector del agua requieren formación específica en procesos productivos, tratamientos y eficiencia energética. "También es fundamental desarrollar competencias personales como el trabajo en equipo, liderazgo y comunicación", añade Gabín. Estas habilidades son esenciales para trabajar y colaborar eficazmente en un sector que impacta directamente en la vida de las personas.
Facsa trabaja en varias líneas estratégicas para el futuro. "Estamos enfocados en la atracción de talento, acreditación formal de competencias y formación abierta para el público en general", explica Gabín. En colaboración con la Universidad Jaume I, Facsa ha lanzado un proyecto de formación dual donde los estudiantes de Ingeniería Química cursan su último año en la empresa, combinando teoría y práctica.
Otro proyecto clave es la acreditación formal de competencias para trabajadores con experiencia, permitiéndoles obtener una titulación oficial. "Queremos reconocer formalmente los conocimientos adquiridos a través de la experiencia profesional", afirma Gabín. Además, Facsa ofrecerá formación en instalación de tuberías plásticas, una necesidad identificada en la recepción de obras ejecutadas por terceros.