Si no hay cambios de última hora en la comisión que se celebra esta semana, la Losu (ley orgánica del sistema universitario) entrará en vigor tras pasar por el Pleno del Congreso. Será la tercera norma universitaria de la democracia. Sustituirá a la Lou, una norma aprobada hace 20 años. Por lo visto, leído y escuchado, la norma no ha dejado indiferente a nadie, tantos detractrores, quiza mas, que defensores. Complejo analizar este asunto pero necesario comprender para saber por dónde van a ir los tiros, a partir de ahora. Lo hacemos con Joaquín Aldas, Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales, Universitat de València) es Catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados en la Facultat d’Economia de la Universitat de València, Investigador del Ivie y Visiting Research Fellow de la University of Glasgow (UK).
Coinciden todos, independientemente del contenido de la norma, que era necesario y urgente, cambiar la ley, actualizarla. Esta norma puede interpretarse como una férrea defensa del estado de autonomías, alejando unas CC.AA de otras, creando 17 sistemas universitario, aunque Aldas entiende que no es del todo así, si que se produce una descentralización en el sistema pero difiere de otros sistemas europeos similares. "La norma difiere en varias cuestiones de las normas europeas, en esa descentralización, que deja mucho margen a la regulación autonómica, generará disfunciones, en el papel, por ejemplo, de los consejos sociales, que no necesariamente es malo, pero deja en manos de las agencias de calidad de las CCAA la posibilidad de regular los procesos de acreditación del profesorado, eso puede hacer que lo se pida a un profesor en el Páis Vasco sea distinto a lo que se le pida en otro territorio", explica Aldas.
Respecto a la financiación, el texto incorpora el compromiso de que el 1% del PIB se dedique a la enseñanza universitaria. El Estado se compromete a aumentar la financiación mientras que las comunidades deberán comprometer a destinar los fondos recibidos a la educación superior. "Esta norma viene sin memoria económica, y esta descentralización supone que cuando el que tiene que poner el dinero la Generalitat depende de las limitaciones que tenemos como la infrafinanciación, y otros territorios tendrán mas capacidad de financiación y de progreso", sostiene Aldas.
Uno de los objetivos, tiene que ver con el profesorado y su estabilidad laboral, se quiere reducir la temporalidad, se pretende dignificar la figura dle profesor asociado pero una de las criticas que se han hecho es que se elimina el carácter estatal de la acreditación a los cuerpos docentes e investigadores de funcionarios. Cambian también las normas para ser rector o rectora, "la ley abre a que sean funcionarios o profesores titulares a tiempo completo, hasta ahora era solo para catedráticos, que están en el tope de su carrera, y las decisiones que tomará no influirán en su futura carrera, los profesores podrán marcar las normas de los concursos", asegura el Catedrático.
La Losu -pensada para avanzar hacia un horizonte de universidad gratuita entrará en vigor en el primer semestre de 2023. Sin embargo, para todo lo que tiene que ver con el profesorado y su estabilidad laboral, la aplicación de la norma se aplazará hasta el curso 2025-26.